Que el confinamiento ha sido un aburrimiento, es una idea que muchos comparten; que tratamos de atenuar el aburrimiento picoteando entre horas parece ser un hecho irrefutable.
Así lo demuestra el último estudio hecho por la Sociedad Española de Obesidad, que ha rebelado que el 44% de los españoles ha aumentado entre 1 y 3 kilos durante el confinamiento.
Y es que cuando nos aburrimos, lo normal es que nos de por comer y beber lo que menos nos ayuda a mantener la bascula a raya. El consumo de alcohol y azúcares aumentó un 50% durante los meses de marzo y abril.
El nivel de estudios, el tamaño de las viviendas o la situación económica, han sido algunos de los factores a tener en cuenta a la hora de analizar el cambio que se produjo en los hábitos alimenticios de muchos españoles durante la pandemia.
El sedentarismo, unido al «picoteo», han sido el tándem perfecto para que muchos españoles dejaran la operación bikini para otro momento.
Los profesionales sanitarios recuerdan que la obesidad es un factor de riesgo ante el Covid-19. Por este hacen un llamamiento a recuperar los hábitos de vida saludable para procurar minimizar los efectos de un posible contagio.