Sin miedo a equivocarnos podemos afirmar que las máquinas tragaperras son el juego de azar y de casinos que más popularidad han alcanzado en todo el mundo.
La primera máquina tragaperras en el mundo data de 1887, cuando el alemán con residencia en Filadelfia, Charles Fey creo una máquina que emulaba a las que ya había de póker y que como premio daban una bebida o un caramelo. La novedad de su máquina es que el premio era monetario, un apetecible botín para todos aquellos que decidían tentar a la suerte; la primera máquina de estas características se colocó en un salón de juegos en la ciudad de San Francisco.
Desde las primeras tragaperras con dinero real, la evolución de este tipo de máquinas tragamonedas ha sido vertiginosa, hasta llegar a las más usadas hoy en día que son las máquinas tragaperras online. Esta nueva modalidad tiene la ventaja que se puede jugar desde la intimidad de tu casa sin que nadie te moleste las 24 horas del día.
Tras su creación, como hemos dicho en EEUU, las máquinas tragaperras no tardan en llegar al resto del mundo convirtiéndose en una opción de negocio para algunos y una forma de diversión irresistible para otros.
Su llegada a España fue irregular, ya que durante la dictadura estuvieron prohibidas; tras el fallecimiento del dictador en 1977 se legaliza su colocación pero no solo en los salones de juego sino que también lo hacen en las cafeterías. Las tragaperras forman parte del mobiliario habitual de los locales de hostelería, convirtiéndose en el destino de las vueltas de las consumiciones. Con luces y músicas muy atractivas, pocos son los que se resisten a hacer girar la suerte.
En 1981, momento en el que se legalizan este tipo de máquinas en nuestro país, había alrededor de 1.000 máquinas tragamonedas repartidas por los casinos de nuestro país, con una previsión de crecimiento estimada, hasta llegar a las 3.000. Las empresas españolas vieron en estas máquinas un jugoso pastel que pronto comenzaron a fabricar. Desde los primeros modelos de frutas se pasó a otros más sofisticadas en diseño que conseguían atrapar al jugador antes incluso de insertar las monedas.
Con la llegada de internet los operadores del negocio pudieron pasarse a la versión online, después de que importantes empresas de software pusieran su tecnología al servicio de los juegos de azar, creando juegos de slots de última generación.
Para jugar a las tragaperras online tan solo tienes que seguir unos sencillos pasos:
- Escoge el casino online en el que quieras jugar.
- Deber dotar a tu cuenta de fondos con el método de pago que decidas seleccionar, ya sea tarjeta bancaria o paypal
- Una vez que hayas decidido un juego, debes asignarle un fondo de apuestas.
Las tragaperras son opciones muy jugosas ya que ofrecen la posibilidad de un juego rápido, con beneficios o pérdidas al instante. Este es el mayor aliciente para los que eligen esta opción de juego, teniendo en cuenta que la suerte jugará un papel fundamental en este tipo de actividades.
¿Estás preparado o preparada para hacer girar los tambores? Nunca se sabe cuando la suerte puede estar de tu lado.