Recientemente el Tribunal Supremo publicaba una sentencia según la cual, se impide que los políticos accedan a mejoras económicas y en sus puestos, tras su declaración como tránsfugas. Una palabra oída con mucha frecuencia en la provincia de Ourense en este año 2020, con movimientos en distintos Concellos con la capital a la cabeza. De hecho el primero en sufrir los rigores de esta sentencia, fue Miguel Caride, en otros tiempos amigo y compañero de batallas del Alcalde de Ourense en el consistorio que tuvo que dejar su puesto como vicepresidente de la Diputación de Ourense tras haber pasado a la fila de los denominados tránsfugas.
Ahora es el turno de Santiago Barja, hasta hace unos días miembro de la Junta de gobierno Local y segundo Teniente de Alcalde de la localidad ourensana de Viana do Bolo. Situación curiosa la de este concello en la que el propio alcalde, Abelardo Carballo, se presentó junto con Barja formando parte de las listas del PSOE. Hace unos meses los dos abandonaban las filas socialistas para apoyar al PP en la moción de censura que arrebataría la alcaldía al nacionalista Secundino Fernández. Una jugada que los llevaría a ambos a estar en primera fila en la toma de decisiones locales.
¿Qué pasa con el alcalde ahora? ¿Debe él también abandonar el cargo al que accedió con posterioridad a su declaración como tránsfuga? En principio el hecho de que haya sido elegido por el Pleno y no deba su puesto a una designación directa, parece que lo deja fuera de los supuestos a los que se les aplica esta sentencia. De momento Abelardo Carballo seguirá al frente de la Alcaldía de Viana do Bolo a pesar de la sentencia del Tribunal Supremo.
