«Ir a por lana y salir trasquilado», un refrán que le viene como anillo al dedo al vecino de Verín que tuvo la brillante idea de regresar a por la droga que había arrojado por la ventanilla de su coche, cuando 30 minutos antes los agentes de la Guardia Civil le habían dado el alto.
Tras deshacerse del botín en un primer momento, no quiso quedarse sin su «mercancía», por lo que no tardó ni una hora en intentar recuperarla; en ese momento fue detenido por los mismos agentes que lo habían interceptado.
Dos años después de aquellos hechos, el ahora acusado ha aceptado una pena de dos años de prisión y 4.800€ de multa por tenencia de 19,51 gramos de cocaína. El acusado era un consumidor habitual, un hecho que fue aplicado como atenuante por el juez.