Los trabajadores de la recogida de la basura de Allariz se encontraban con una terrible imagen esta mañana mientras realizaban sus labores; cinco crías de perro, de apenas un mes de vida habían sido arrojados a un contendor.
Cuatro de ellos se encontraban acurrucados en un lado del contenedor, mientras que otro inspeccionaba, ajeno al peligro que corría, el lugar que algún desalmado había escogido para terminar con sus días.
Los cachorros fueron trasladados a las instalaciones de Protección Civil de Allariz, donde sus voluntarios hicieron un llamamiento para encontrarles un hogar. Afortunadamente para ellos hubo cinco familias dispuestas a ofrecerle su hogar, en donde se encuentran ya descansando tranquilos.
Los miembros de protección civil no dejaron pasar la oportunidad de recordar a las personas que «cometen este tipo de actos totalmente inhumanos que hai vías para facer as cousas doutro xeito…»