Quince meses de prisión, esa es la pena que la fiscalía de Ourense ha solicitado para el inquilino de un piso que tras abandonarlo en 2016 se llevó, según manifiesta la dueña del piso, varios enseres que había dentro.
Una vez que el contrato de alquiler hubo vencido, la dueña accedió a la vivienda en donde según su declaración faltaban algunos muebles, concretamente una cama, una silla, dos sofás y una alfombra. También incluye en la lista de enseres sustraídos, diversos efectos personales valorados en 450 euros.
El inquilino se enfrenta a una pena de 15 años de prisión, por apropiación indebida. En el escrito de acusación queda reflejado que hay constancia de que en momento de firmarse el alquiler, los muebles estaban en su interior, desapareciendo con posterioridad.
