En la madrugada del pasado martes, la Policía Local tuvo que acudir al número 4 de la Calle Ramón y Cajal de la ciudad tras recibir la llamada de una persona que decía escuchar gritos de su vecina de 85 años.
A la llegada de los agentes la policía no escuchó ruido alguno, por lo que se temió que la mujer pudiera encontrarse mal. Los bomberos fueron los encargados de acceder a la vivienda a través de un balcón. Una vez en el interior se encontraron a la mujer tirada en el suelo de la habitación, desorienta y sin poder levantarse. La anciana manifestó que se había caído.
Los servicios sanitarios la trasladaron al CHUO para su observación.