Una comunicación telefónica realizada a las 2:30 de esta madrugada puso en alerta a los Bomberos y a la Policía Local de Ourense; en la llamada se informaba de que en una vivienda de la Calle San Quintín, concretamente el número 2, podría estar en llamas ya que salía humo de su interior.
Dos patrullas de la Policía Local y los Bomberos se trasladaron hasta el lugar indicado, comprobando que por la fachada del edificio salía abundante humo. Tras asegurarse de que en dicho edificio no vivía nadie, desalojaron a los vecinos del edificio colindante, en la Calle Cardenal Cisneros, ante el peligro de que hubiese algún desprendimiento en la fachada del edificio afectado por las llamas.
Tras comprobar que no había peligro alguno, los vecinos pudieron regresar a sus casas.
El Concejal de Seguridad Ciudadana, Telmo Ucha, declaró que al tratarse de un edificio antiguo, con maderas de «primeira calidade, que son moi resistentes», no corre peligro de derrumbe; la rápida intervención de los cuerpos de seguridad ciudadana propiciaron que los daños fueron menores.
