La explosión de contagios en la provincia ha tenido ya sus consecuencias, la Xunta ha determinado que Ourense, Barbadás y O Barco pasen a nivel alto de restricciones a partir de la madrugada del sábado 17 de julio. Una medida que afecta de manera directa a los negocios de hostelería y ocio nocturno, una vez más, serán los que tengan que pagar las consecuencias de la pandemia.
El ocio nocturno tendrá que cerrar sus puertas, mientras que la hostelería no podrá servir en el interior; en el exterior solo podrá completar el 50% de su aforo. Los grupos de no convivientes en terrazas no podrán superar las 10 personas. Se hace una recomendación para que en el ámbito privado se cumpla este límite en las reuniones.
En las últimas 24 horas la ciudad de Ourense ha elevado en 64 en número de casos activos, alcanzando la cifra de 692 positivos en la ciudad; en la provincia el número de infectados asciende ya a 1.243 personas.