La residencia de la tercera edad situada en Baños de Molgas, perteneciente a un centro de la Fundación San Rosendo, acogerá a los usuarios de los geriátricos enfermos por COVID-19.
Con capacidad para 93 plazas abrirá sus puertas para aquellos ancianos que lo necesiten. Los primeros 13 usuarios ya han sido trasladados al centro desde la residencia San Carlos de Celanova.
De esta forma se trata de prestar a los enfermos una mejor asistencia en unas instalaciones que estarán preparadas para esta situación excepcional.