Si usted se encuentra en el parque de San Lázaro esta semana, podrá notar que está de vuelta un “elemento del mobiliario urbano” que era habitual ver antes de la pandemia: rostros sonrientes junto a coloridos exhibidores de publicaciones gratuitas basadas en la Biblia que contienen un mensaje positivo.
Miles de estos exhibidores rodarán por las calles de ciudades como Ourense, debido a que los testigos de Jehová reanudan su labor de predicación pública en todo mundo, unos veinticuatro meses después de haberla puesto en pausa debido a la pandemia.
“Volver a ver a nuestros vecinos cara a cara es increíble”, dijo Cristina, una voluntaria habitual en el lugar. “Realmente echaba de menos el contacto personal. Ver la cara de alguien que está feliz por escuchar el mensaje de esperanza que llevamos, ¡me alegra el día! Esta es mi forma personal de mostrar mi amor al prójimo”.
La organización cristiana ha vuelto a su ministerio público por primera vez desde marzo de 2020, momento en el que se suspendió toda forma presencial de su actividad voluntaria debido a su preocupación por la salud y la seguridad de las personas.
En respuesta a esta decisión de carácter mundial, 3 congregaciones en el área local están comenzando a ubicar los exhibidores de publicaciones portátiles en las inmediaciones del CHUO, el parque de San Lázaro, la estación de tren, el puente romano, la plaza de abastos, o la confluencia de Rúa do Paseo con Lamas Carvajal y San Miguel.
Las congregaciones locales también reanudarán los cursos bíblicos gratuitos en persona, así como las visitas personales a aquellos que les han invitado a volver a sus casas. Esto se produce dos meses después de que los testigos de Jehová volvieran a sus salones del reino para celebrar de nuevo sus reuniones presencialmente.
“Aunque entendemos que la pandemia no ha terminado, estamos entrando en una fase de aprendizaje para convivir con el COVID”, dijo Pablo Vázquez, portavoz local de los testigos de Jehová. “De momento no reanudaremos la predicación de casa en casa, ya que somos conscientes de los riesgos a los que todavía se enfrentan nuestros vecinos y nuestros voluntarios”.
Los exhibidores portátiles de publicaciones basadas en la Biblia han sido parte del ministerio público de los testigos de Jehová en España desde 2011. Si bien estos exhibidores comenzaron a verse en primer lugar en las grandes áreas metropolitanas de todo el mundo, rápidamente se extendieron a decenas de miles de localidades más pequeñas, convirtiéndose en un elemento fijo en las estaciones de tren y autobús, plazas y calles principales.
“Nuestro ministerio público nos ha dado la oportunidad de difundir un mensaje positivo a nuestros vecinos en su propia zona”, dijo Manuel Gil. “Cuando ven el mensaje positivo de nuestro cartel, muchos quieren acercarse para hablar. Hemos tenido la oportunidad de conocer a muchas personas que aprecian la labor que realizamos y que se han visto afectadas positivamente por ella”.
