Hasta un total de nueve detenciones no han hecho que Humberto, un indigente de 43 años, cese en sus actos de acoso e intimidación a los viandantes de las calles de Ourense.
La zona del Posío ha sido testigo de sus malos modos durante el fin de semana. Insultos, amenazas e incluso escupitajos son algunos de los hechos que denunciaron los viandantes durante el sábado. Un cliente de una cafetería sufrió en sus carnes la consecuencia de haberle recriminado su actitud en el interior de un bar.
Tras localizarlo sentado en un banco de la zona, la policía procedió a su detención y puesta a disposición judicial. El juez lo puso en libertad, tras haber decretado una orden de alejamiento para el indigente, que no podrá acercarse al propietario de una cafetería al que ha llegado a perseguir por la calle.
El hostelero ha declarado que la actitud de esta persona le ha supuesto la pérdida de muchos clientes, que tienen miedo a encontrarse con este sujeto.