A pesar de que el alcalde de Ourense, anunciaba hace algunas semanas que las luces navideñas de Ourense, se encenderían coincidiendo con la reapertura de la hostelería, en un homenaje a este sector tan castigado durante la pandemia. De hecho como puede apreciarse en la fotografía tomada durante la tarde de ayer, no están ni siquiera instaladas en la principal calle de la ciudad.
El motivo, según expuso Pérez Jácome en el pleno de ayer «la negligencia» o «la torpeza» de un funcionario que tenía que elaborar los pliegos del contrato de adjudicación y cometió un error que tardó en subsanar más de dos semanas. Esto ha provocado que la fecha estimada de encendido de las luces sea el 11 de este mes, un retraso derivado de la tardanza de la empresa en colocar las luces. Este hecho, dijo el regidor, hará que se plantee con la empresa la rebaja del precio del contrato, estimado inicialmente en 324.000 euros.