En un comunicado enviado esta mañana a la prensa, la Fundación Franz Weber, organización internacional con amplia trayectoria en defensa de los animales y el Medio Natural, ha censurado el reciente desfile navideño con dromedarios por las calles de Ourense.
La actividad, según la organización, fue contratada por el Ayuntamiento, ignorando dicen, las quejas ciudadanas y de colectivos que vienen advirtiendo sobre las consecuencias negativas que suponen estas prácticas para los animales, pero también por la imagen que transmite a los más pequeños y pequeñas de cada familia.
Según denuncian en el comunicado, los animales son sometidos a contextos de estrés innecesarios, al bullicio de adultos y menores y sufriendo un desplazamiento que «dista mucho de las condiciones de su hábitat natural».
Con estas conductas, explican, se enseña a la niñez una imagen completamente irreal del comportamiento natural y las necesidades de los dromedarios, contribuyendo a «cosificar» a estos seres vivos como meros objetos de entretenimiento o decorativos para un fin concreto: un desfile de caracterización navideña.
La organización entiende que con la contratación por parte de las administraciones públicas de estos servicios, se alimenta un negocio que, en no pocas ocasiones, financia la captura de animales en su hábitats originales para criar y generar dinero con su cautiverio, bien con el alquiler para eventos o como parte de pseudozoos sin ningún tipo de finalidad científica, educativa o conservacionista. El equipo de gobierno de la ciudad, dicen, es «reincidente» en malestar animal.
La Fundación pone como ejemplo imitar las apuestas que diversos gobiernos locales como el de A Coruña, Vigo o Pontevedra, han puesto en marcha para sus cabalgatas festivas. En estas localidades, dicen, contratan compañías de teatro y empresas especializadas en grandes eventos que logran concitar a muchas más familias que un desfile con animales vivo.
