Las pensiones en Galicia se encuentran entre las más bajas del Estado, con una diferencia de casi 15 puntos respecto a la media nacional y 173 euros menos al mes. Ourense, en particular, ostenta la media de pensiones más baja. Ante esta situación, el colectivo de jubilados y pensionistas de la CIG se movilizó en las siete principales ciudades gallegas exigiendo la equiparación por ley de las pensiones mínimas con el SMI, que debería alcanzar 1.253 euros, tal como recoge la Carta Social Europea.
Asimismo, demandan una revalorización conforme al IPC acumulado anual y la recuperación del poder adquisitivo perdido desde 2021. La brecha de género sigue siendo alarmante, con las mujeres percibiendo 421,88 euros menos que los hombres, reflejando una desigualdad del 33,6%.