A las 00:00 de hoy, 3 de abril, comenzaba la huelga del transporte urbano de Ourense. Una primera jornada en la que los servicios mínimos fijados en un 52,8% por el Concello no podían llevar a cabo su labor por la presencia de piquetes y el sabotaje de algunos autobuses.
A las 10 de la mañana la concentración de los trabajadores se trasladaba a la Plaza Mayor, momento en el cual se producía uno de los momentos más tensos de la jornada, cuando una sindicalista que portaba un megáfono era increpada por el alcalde, llegando a producirse un forcejeo entre ambos.
En una posterior declaración, el alcalde justificó su acción, alegando que actuó de forma instintiva «diante da ameaza dunha agresión acústica por parte dunha sindicalista, que vociferou co megáfono a 10 centímetros da súa cabeza, cun risco potencial de perda auditiva o rotura de tímpano»
El PP, socio de gobierno municipal de Jácome, ha querido desmarcarse de esta acción «irrespectuosa» del alcalde, pidiendo a este que pida perdón por los mismos.
El PSOE ha ido más allá, pidiendo la «dimisión inmediata» del alcalde tras lo que no dudan en calificar como agresión. Los socialistas calificaron su actitud como «agresión machista e misóxina». Pidieron además al PP que dejen de amparar este tipo de actitudes violentas, manteniendo «ao fronte da alcaldía de Ourense a unha persoa que agrede física e verbalmente á cidadanía»