El pasado mes de julio se cerró en Ourense con un descenso en el número de demandantes de empleo; un total de 875 personas consiguieron un trabajo el pasado mes.
Con este descenso la tasa de desempleados se sitúa en la provincia en 17.325 personas, 2.241 personas menos que en el mismo mes del año pasado.
Ourense contabiliza un total de 103.591 afiliados a la Seguridad Social, 80.280 de los cuales cotizan en el Régimen general. Desde el pasado mes de junio el número de cotizantes ha aumentado en 1.115 personas; con respecto a la misma fecha del año pasado el número de afiliados ha subido en 1.925 personas.
En cuanto a los ERTE, en la provincia quedan todavía 1.615 trabajadores en esta situación, 440 menos que los que había en Julio.
Desde la CEO valoran estos datos como positivos sin olvidar que la quinta ola ha pillado a todo el mundo por sorpresa en un verano que prometía ser mejor en términos de recuperación de puestos de trabajo. El descenso del paro, señalan «va acorde a la temporada estival que siempre registra mayores datos de colocación.2
A pesar de que los datos son positivos, recuerdan, todavía quedan trabajadores en ERTE o que han perdido su trabajo; todos ellos necesitan una actualización o reciclaje formativo y políticas activas de empleo para volver al mercado laboral, bien desempeñando sus tareas habituales o bien en otras que la Formación para el Empleo le puede proporcionar en esta época enormes cambios y exigencias del merado laboral.
Desde la Confederación de empresarios de Ourense, siguen esperando a que la aprobación del PXOM llegue para «acometer proyectos paralizados y generar creación de empleo en ese sector y sus auxiliares»
En referencia a la reforma del mercado laboral y el aumento del SMI, desde la confederación ourensana consideran que no es el momento de abordarlas hasta que no se consolide la recuperación; estas medidas, señalan, podrían dañar la creación de empleo y la recuperación de todo el tejido empresarial, sobre todo en el caso de las pymes y autónomos, que verían mermada su capacidad de contratación con un aumento de los costes salariales.
