La XXXII edición dela Fiesta del Cabrito de Vilariño de Conso tendría que haberse celebrado hoy como cada año. Una cita gastronómica incluida en las celebraciones del entroido en la localidad ourensana que ya el año pasado tuvo que ser suspendida.
Este año el Concello ha querido seguir con la tradición de desgustar un buen cabrito al horno, aunque sea cada uno en sus casa, por eso durante el día de hoy ha llevado a todos sus vecinos una ración de cabrito con guarnición, bica y licores.
Una iniciativa en la que estaban incluidos todos los vecinos que bien podían pasar a recogerlo en el pabellón de la localidad, previa reserva o se les hacía llegar a su casa.
Desde el concello se pedía a todos los vecinos que participaran de la fiesta cada uno en su casa, con «sentidiño para seguir na boa senda».