Con temperaturas que el sábado alcanzarán los 34 grados, el primer fin de semana de septiembre se convierte en el momento ideal para llevar a cabo esos planes que hemos ido dejando durante el verano.
Las playas fluviales de la provincia, los montes y localidades que nos rodean o ¿cómo no? la propia ciudad de Ourense, son una estupenda opción para disfrutar de los últimos coletazos del verano de 2020.
A pesar de que la capital se encuentra en estos momentos sometida a nuevas restricciones a causa de la pandemia, es momento de aprovechar que la afluencia del turismo ha descencido para conocer de cerca todos los encantos de la provincia.