Tras anunciar hace algunas semanas que el Auditorio de Ourense retomaría su programación cuando la actualidad sanitaria permitiera un mayor aforo en el recinto, hoy el regidor ha comunicado su decisión de «poner en valor» la zona del Auditorio.
Dicha «puesta en valor» se basaría en la externalización, a través de un contrato público, de la gestión de:
- Un parking que funcionaría las 24 horas del día
- Una cafetería que se situaría en las explanadas del auditorio
- La propia explotación técnica y artística del auditorio.
El auditorio acogería las actuaciones previstas a iniciativa del concello y las de la empresa que lo gestionaría, de esta forma, a su entender «serán eventos que se adapten a los gustos y a los tiempos de la ciudadanía (y no a los gustos de los programadores o deseos de los proveedores del sector)»
Añade acto seguido que, «el público que asista pasará a ser mayoritario y variado, en vez de minoritario y repetido.»
Las reacciones a esta decisión no se han hecho esperar; el BNG ha mostrado su oposición a la medida de forma contundente, señalando que es una consecuencia de lo que viene denunciando desde hace meses con las medidas tomadas desde el concello :»É unha evidencia máis da estratexia, desmantelamento e privatización da cultura». Señalan además que tanto Jácome como el PP están «conducindo ao concello a unha perigosa deriva».
El PSOE por su parte acusa a Jácome de «espoliar» el patrimonio cultural de Ourense con la privatización del complejo de San Francisco. Califican además la postura de Jesús Vázquez, líder del PP ourensano, como una postura cínica ya que «fai continuos chamados á unidade da oposición, mentres segue a apoiar o alcalde»
