Situada en Quintela de Canedo, desde el año 1850, Chocolates Chaparro endulzaba en paladar de los ourensanos más golosos. Por fortuna, podremos seguir disfrutando de este magnífico chocolate ya que tras anunciarse su cierre la pasada semana, hoy hemos conocido que una empresa de Salvaterra de Miño ha comprado la marca y con ella la fórmula magistral de tan exquisita elaboración.
Y es que hablar de Chocolates Chaparro en Galicia, es hablar de tradición y costumbres, de las tardes de invierno alrededor de una buena taza de chocolate a la taza; de tardes de domingo en familia con unos churros y un buen chocolate caliente para acompañar.
La prestigiosa empresa gallega consiguió perdurar en el tiempo gracias a sus elaboraciones de gran calidad, contando siempre con las mejores materias primas y siguiendo un cuidado proceso de elaboración artesano.
Si eres de los que tras el anunciado cierre, no pudo hacerse con una de las tabletas que aún estaban en las estanterías de algún supermercado, pronto podrás hacerte con tu ansiado botín. Nada como un buen chocolate, para quitarnos el susto del cuerpo.