El Club Ourense Baloncesto logró una agónica victoria ante el Lleida por 74-76, en un partido que se decidió en cinco últimos minutos emocionantes y que le permite depender de sí mismo para conseguir la permanencia.
Tras las dos derrotas bochornosas ante Huesca, el COB necesitaba cambiar el chip y desde los primeros minutos se vió que era otro. Los dos primeros fueron muy igualados, con ligeras ventajas para los cobistas, debido a una buena dirección de Úriz, Menzies dominando las zonas y con Yates y Adonys aportando puntos. Por su parte, Lleida se mantenía en el encuentro gracias al acierto de Polanco y Manuel. Al descanso se llegó con 31-33 para el COB.
Tras la reanudación, Lleida salió más entonado y le dió la vuelta al marcador (38-34). El acierto desde la línea de tres puntos de Chapela y Feliú dispararon a los locales a los siete puntos de ventaja mediado el tercer cuarto (47-40). El COB no se hundió, apretó en defensa y llevó el empate a 49-49 a falta de diez minutos por jugar.
Los dos equipos se jugaban la vida en el último cuarto, y la tensión se notaba en la pista. Cada ventaja del COB era contrarrestada por el Lleida. Pero a falta de cinco minutos, despertó Spight con espectaculares canastas que daban ventaja a los ourensanos. Lleida conseguía empatar a 74 con 15 segundos por jugar. Una canasta de Yates en la zona ponía el 74-76. Quedaban cuatro segundos, Bulic fallaba para los catalanes y victoria que llevaba la euforia al conjunto cobista.
Ahora a pensar en el partido del próximo domingo ante el Canoe a las 12:30 horas en el Paco Paz para rematar la faena.