Un vecino de las inmediaciones de La Molinera protesta porque hay personas que se desplazan hasta la zona para dar de comer a las palomas: «Llegan en coche, se bajan y se dedican a echarles pan a las palomas, consiguiendo que cada día haya mas; el problema es la suciedad que generan en las fachadas y en nuestras ventanas, saben que tienen comida y no se van»..