
Callejeando por el barrio del Couto encontramos oculto en las inmediaciones del parque Barbaña, una pequeña gran obra de arte en forma de graffiti. En el podemos ver representado a Pennywise, el payaso bailarín, al que Stephen King dio vida allá por el año 1986 y el cine se encargó de darle la fama gracias a varias películas.
El realismo de la pintura desde luego, hace que a más de uno y de una le tiemblen las piernas al verlo.
Más allá de la discusión que genera el hecho de que estas obras se hagan en fachadas de edificios, hay que destacar el alto grado de detalles que consigue la obra. Felicidades a su autor desde Ourense.com
